domingo, 28 de septiembre de 2008

Saber cuando aplaudir

Antes de que el director bajara la batuta el patio de butacas ya se deshacía en aplausos. Los músicos que llegaban al Teatro Municipal se quedaban sorprendidos por el gusto popular por las ovaciones, tamizadas por la necesidad de mantener las apariencias en un concierto de música clásica (esto es de gente fisna, aplaude niño, pero no silbes). Cada vez que parecía que la pieza terminaba, alguien comenzaba a tocar las palmas, ya fuera en un concierto de la Orquesta de Salzburgo o de la Banda Municipal de Santa Ana.

El concurso de clarinete ha venido para marcar las diferencias. Durante el concierto final, el público, muy atento al programa de mano, supo aplaudir a tiempo, pedir el bis sin gritar ¡otra, otra!, y , por suerte, no terminó la ovación tocando palmas por sevillanas ni poniéndose de pie innecesariamente.

Claro está que el poco público que acude al concurso de clarinete sabe lo que es un concierto de clásica.

viernes, 26 de septiembre de 2008

¡Robaron los artículos!

Los artículos, los determinantes, los conectores... todas esas palabritas que hacen comprensible un texto, una frase, una idea. Pues los han robado todos. Al menos todos los que había en el gabinete de prensa del Ayuntamiento. ¿Pues no que me encuentro en un punto del día "Comunicación suscripción escritura incremento participación municipal en EMASESA". Parece una retahíla de palabras yuxtapuestas sin sentido, como una lista de la compra. Por favor, si alguien lo entiende que me lo diga. Y qué decir cuando empecemos con los planes SEN-2 y siglas que esconden actuaciones urbanísticas que nadie sabe dónde están...

No me extraña que los de Transparencia Internacional le dieran un puesto tan bajo al Ayuntamiento nazareno.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Hiriendo sensibilidades

Resulta que si roban en un colegio es mejor no decir nada, porque los padres no querrán matricular allí a sus hijos. Para no herir sensibilidades es más efectivo escribir "Los ordenadores del colegio desaparecieron misteriosamente" que "El CEIP Vicente Aleixandre sufre un robo y varios destrozos durante el fin de semana". Resulta que es mejor no hablar mucho antes que mejorar los sistemas de seguridad. Claro que había cámaras de vigilancia, pero no es tan fácil identificar a los ladrones. Me dicen que el director se ha quejado al ayuntamiento, sin embargo, leo frases textuales de declaraciones suyas en otro medio (ABC de Sevilla, 11-09-2008: "«Hicieron mucho daño al mobiliario, desde marcos de puertas rotos a patadas en varias aulas, hasta despachos desvalijados y pasillos llenos con espuma de extintores que estaban en la planta superior», explicó el director del colegio, Manuel Martínez.", fdo. Nuria Pérez Campaña).
Y lo que más molesta al parecer es que la policía piense que este tipo de robos los cometen antiguos alumnos, por lo que pueda perjudicar a la imagen del centro. Claro que el nuevo edificio sólo ha tenido dos promociones de sexto, claro que es difícil que te salga un garbanzo negro en un paquete de un kilo, claro que los chicos con 12 y 13 años no son violentos ni roban, claro que nadie mató a Sandra Palo.